¿Cuánto sirven las referencia laborales?

En mi posteo anterior, "Todos los reclutadores son unos malvados...", observaba la tendencia a responzabilizar a otros de nuestra situación actual, especialmente en el proceso de búsqueda laboral.
Hace unos días, un reclutador comentaba que luego de entrevistar a un candidato que le había parecido muy bueno, llamó a su anterior empleo, le dieron pésimas referencias, y entonces se preguntaba que hacer ante esa situación, y mencionaba la posibilidad del "Hostigamiento Laboral" por parte del antiguo empleador.
Creo, que estamos sobredimensionando ese tema.
En términos generales, ninguna empresa seria, se propone hostigar a los colaboradores, ni se planea hacerles la vida imposible luego de su salida.
Las empresas no tienen tiempo para eso. Especialmente las grandes.
Pienso que si una empresa da una referencia negativa, hay que atenderla, y no descartarla.
Será necesario intentar obtener una segunda referencia o incluso volver a entrevistar al candidato tratando de entender que pudo haber ocasionado esta discrepancia entre la percepción del reclutador y la referencia negativa.
Siempre es útil, a la hora de integrar un nuevo miembro al equipo buscar al menos tres entrevistadores, y que cada uno de ellos tenga un perfil diferente. Eso provee una mayor objetividad en la decisión final.

Todos los reclutadores son unos malvados, no me dan Feedback y no me contratan.... (a mi, que soy un/a genio/genia)... (y eso que ya fui a 20 entrevistas)...

Resulta interesante leer constantemente en LinkedIn, las quejas permanentes de personas que no consiguen trabajo (situación muy estresante), y que responsabilizan frecuentemente a otro de dicho pesar.
Normalmente este otro, o bien es el reclutador de turno, o bien es la empresa o las empresas, que no valoran adecuadamente ni el tiempo, ni las habilidades, ni el conocimiento del desafortunado candidato.
Seguramente, en algún caso, habrá algún reclutador que tuvo un mal día, o alguna empresa que no tiene claro lo que busca.
Pero la verdad es que si has participado de varias búsquedas y en ninguna has quedado, es hora de un poco de auto crítica en lugar de responsabilizar a la vida, al sistema, al reclutador o al vecino de enfrente de tu situación.
Algo en tu propuesta de valor no está haciendo click con el mercado.
Piensa que puede ser...
¿Te faltará alguna habilidad que debes desarrollar?
¿Estarás pidiendo condiciones por encima de mercado?
¿Te estarás presentando a búsquedas que no cuadran con tu perfil?
¿Algo en tu interacción transmite inseguridad o desconfianza?
¿Traes un historial de poca permanencia en tus trabajos?

Solo tu puedes cambiar las cosas, una actitud pasiva, en la que la responsabilidad es del otro nunca te ayudará.
Aprovecha cada entrevista para mejorar, piensa que te está faltando.
Consulta a algún conocido (que no sea un amigo incondicional) sobre que piensa que deberías mejorar.
Aguanta el feedback, y ponte manos a la obra. Te irá mucho mejor!